Mi esposa y yo soñamos con muchas cosas cuando nos casamos. Uno de esos sueños era de comprarnos una casa. Durante seis años estuvimos ahorrando un poco de dinero específicamente para cuando fuese posible tratar de cumplir ese sueño, pasaron seis años para que ese sueño empezara a hacerse una realidad. Primero que todo recibimos la información de lo que necesitábamos hacer para iniciar el proceso y me imagino que todos pasamos por ahí. Llego el día en que comenzamos a buscar y no encontramos nada que nos gustara hasta que un día, si un día encontramos un lugar que estaba en construcción, dijimos será una casa nueva y nos gustó mucho el plan, el lugar, y comenzamos a ver con nuestros propios ojos como se iba construyendo, la casa iba a estar lista para el ultimo día del mes de septiembre y así cerrar el negocio en los próximos 15 días del siguiente mes.
Nuestra familia estaba creciendo esperábamos la llegada de un nuevo bebe, mis padres iban a llegar de visita por un mes de Sur América y conocer la nueva bebe y pasar tiempo con su nieto de año y medio.
Bueno, llego el tiempo y la casa nueva no estaba lista, dijimos tenemos 15 días más en el lugar que vivimos, esos 15 días pasaron, mis padres llegaban a la ciudad y nosotros teníamos que conseguir un lugar donde vivir mientras la Casa nueva se terminaba, llegaron mis padres y teníamos la esperanza de que antes de nacer nuestra bebe estaríamos en la nueva Casa, 20 días después nació la bebe y la casa nueva no estaba terminada. Mis padres, mi familia y yo fuimos a vivir al lugar más acogedor con la pareja más dulce, hospitalaria y bondadosa que jamás haya conocido. Mis padres regresaron a su país y la casa no estaba terminada, la bebe crecía y mi hijo disfrutaba del nuevo lugar donde nos encontrábamos, hasta que finalmente a fin de año fuimos a cerrar el negocio en la nueva casa con la persona que siempre estuvo a nuestro lado durante todo este tiempo aquí con todo respeto llamo un ángel.
Bueno la casa nueva no estaba completamente terminada y necesitaban arreglar unos detalles, hemos entrado al nuevo año, el mes casi termina y no hemos pasado ahí la primera noche.
Lo cierto es que tenemos un Dios maravilloso que provee todo lo necesario que necesitamos en este mundo para vivir y un Salvador único como Jesucristo quien le dijo a sus apóstoles en la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Es muy fácil olvidar esto cuando perdemos el enfoque por causa de las cosas materiales y los afanes de esta vida, nos estresamos, nos frustramos y nuestras vidas se convierten en una locura.
Jesucristo está preparando una Casa Nueva para nosotros, la mejor Casa donde estaremos juntos. A esa casa quiero ir y quiero esperar con paciencia ese es mi sueño, mi meta, es algo real, creo en Dios, creo en Jesús y no debo de preocuparme por las cosas de este mundo, Dios siempre tiene algo mejor y en su tiempo para nosotros. No pierdas el enfoque y la bendición de estar en la Casa Nueva.
